En esta ocasión vamos a centrarnos de nuevo en las orquídeas, de las que ya habíamos hablado antes (Orquideas), pero para mejorar su aspecto y floración.
Normalmente las orquídeas que adquirimos en los centros de jardinería suelen estar cultivadas en pequeños contenedores de plástico, que una vez acabada la floración, resultan insuficientes para un buen desarrollo de las raíces y de la parte aérea.
Os quiero proponer una forma fácil de mejorar el aspecto de vuestras orquídeas, mediante el trasplante a contenedores de cristal. De esta forma podemos lograr bonitas composiciones de colores, más vistosas y elegantes.
- Tras sacar la planta del contenedor, lava bien las raíces de la orquídea para eliminar los restos del sustrato original y poda las raíces podridas.
- Elije un contenedor de cristal de dimensiones mayores a las del contenedor original, en función de si sólo vas a trasplantar una o varias al mismo lugar, pero lo suficientemente pequeño para que las raíces estén algo apretadas y que florezcan.
- Coloca algunas piedras de colores diferentes o grava gruesa en el fondo del contenedor de cristal, que facilitarán el drenaje.
- Utiliza un sustrato específico para orquídeas. En nuestro caso, utilizamos corteza de pino. Colócalo con cuidado ejerciendo presión para dar estabilidad a la planta.
- Aplica humedad con un pulverizador sobre las raíces, pero sin que llegue a acumularse agua en el fondo del sustrato.
- Recuerda también utilizar un fertilizante adecuado para orquídeas. Te recomendamos que utilices nuestro Lombrico Orquídeas para conseguir unas plantas bonitas, que te lo agradecerán con sus flores.
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